¿Sabias que el humorista gráfico Forges participó en una becerrada de quintos cuando veraneaba en El Espinar?
Historia del lugar o villa de El Espinar, por don Tomás Báñez de Ribera año 1443
Historia del lugar o villa de El Espinar, por don Tomás Báñez de Ribera, oidor de la Chancillería de Granada. [Manuscrito]
Manuscrito original e inédito, en el cual van incluidas las ordenanzas de los hijosdalgos y vecinos de El Espinar contra los hidalgos de privilegio, fechada en El Espinar el 22 de abril de 1443.
Víctor Espinós con motivo de la organización de la Boda serrana en 1924
Al margen de una fiesta – Por Víctor Espinós Agosto de 1924
Con motivo del evento LA BODA SERRANA
Disciplina, amor, devoción...
Ha querido la Providencia unir nuestro nombre modesto a la realización de una presta artística y patriótica, cuya finalidad espiritual justificaría todos los afanes y todas las fatigas. Una villa histórica entre las de la histórica Mancomunidad segoviana. El Espinar, posee un templo herreriano esplendido, vieja colegiata; de ábside elegante, de naves anchurosas, de bóveda airosa; con un coro principal sobre un arco rebajado que asusta a estos constructores que han cedido el paso a las curvas de hierro, llenas de segmentos y tornillos, tan lejanas de aquellas construidas sobre y por dovelas demostrativas, como las varas de las fasces, de la fuerza hija de la unión; con un coro bajo de haya tallada, en que campean los angelotes mofletudos y sus frutas gigantescas; con un órgano suntuoso... y mal sonante; con un elegante y rico retablo broncíneo y marmóreo...
Esta Iglesia se viene abajo: sólo las cigüeñas, con una candorosa inconsciencia admirable, siguen morando en aleros y salientes, sin que las asuste el techo cuarteado ni el apizarrado abierto y sin que las desengañe la cruel constancia con que suelen verse despojadas de sus nidos, dentro de los cuales ponen los suyos los tordos y estorninos, vecinos bien hallados con los gorriones y vencejos.
Se viene abajo y el cura párroco ha pedido auxilio, porque su dotación es exigua y no puede con tanto. Un Concejo bien regido esta vez, ha hecho suyo el lamento y ha citado a una reunión de autoridades: no hemos ido, naturalmente, a esa reunión, en calidad de autoridades. Por la divina misericordia no tenemos ninguna.
Pero nuestra historia de enamorados de la tradición y nuestro abolengo de organizadores de evocaciones españolas nos han dado un lugar de esa junta. Hemos opinado, hemos propuesto. La junta, afectuosamente, ha prestado su aquiescencia. Viviremos unas horas del tiempo viejo. Trátase en este festejo de rendir homenaje a la tradición nupcial cristiana que es la esencia misma de la continuidad de la existencia social humana. Una boda de hace cien años... A esta distancia, que en la Historia es leve, impera ya la tradición o vibrará la muchedumbre, en presencia de estas vejeces.
No hemos querido escribir una página de historia, sino una evocación. Nuestro plan no es documental, aunque lo apoyemos en los documentos, fríos de suyo... Por eso, en nuestro cañamazo, junto a los novios y los padrinos y los mozos de boda, se agruparán en la comitiva, como guardias de honor, los pastorcillos de las cañadas, los labradores de las mesetas soleadas, los lecheros que hienden los troncos, disputan su presa a las águilas y desafían serenos la ventisca, que ataraza los cuerpos, y desprecian el casi humano lamentar del cárabo que atemoriza las almas; por eso, junto a los elementos líricos y dinámicos de la Sierra, se oirá la voz de la noble poesía suscitada en el corazón de un soñador de la urbe por la severa majestad de la montaña y por el glorioso resplandor de Castilla Madre, y la dulzaina y el tamboril serán bude bucólico de las grandezas épicas de los riscos y de los suaves y románticos efluvios del amor honrado, que también sabe hacer su nido entre las peñas; por eso las hachas de dos bocas, las agujas, los horcones, las palas de aventar, las hoces, rastrillos y cayadas, mostrarán su regocijo engalanados, como nuncios del trabajo florecido y por eso, también, a los requerimientos cordiales de colaboración en este empeño, cederán juntos y unánimes los hombres del campo y los hombres de la ciudad como en un grato y momentáneo retornar al primitivo ruralismo fraternal: todos de la tierra y la tierra para todos, bajo la mirada providente, paterna, infinitamente comprensiva de Dios Creador, Dios Redentor, Dios Glorificador.
Y de entre la muchedumbre han surgido, como a un conjuro muy cristiano y muy español, desde los revoltosos chicuelos del «revoleo» hasta las parejas majas que han de lucir su gentileza sobre los enjaezados potros serranos; desde los rabadanes de cabreña modrila, hasta las mozas segovianas que se erguirán sobre las carretas (gualdrapas populares, cuernas doradas) empavesadas como sobre un trono, o desharán los pliegues de su garbosa manteo carmesí en la honesta y graciosa “Rueda”; desde los bueyeros, que parecen personajes de Longo, hasta las humorísticas figuras del juez y el notario con sus chisterones de alas planas y seda erizada.,.
Se ha vitoreado a España, entre varios miles de almas, que, enfervorizadas, han respondido en pie; mientras sonaba en la tierra la Marcha Española y en el cielo los estampidos de las salvas populares, que son los cohetes tronadores; han ondeado en manos femeniles (sesenta, setenta mozas serranas.,.) banderas policromadas de gloriosa heraldina regional, se ha danzado la señora, la honrada danza, entre graciosa y hierática, en anillo de vibrantes eslabones; se ha bebido el "serrano aloque, «el zumo de la vid, que alegra el corazón del hombre», se ha vivido una hora inolvidable en suma. Antes, en los hogares, se ha volcado el arca, en busca del recto calzón de estezado, de la montera parda, del vistoso pañuelo bordado, de la rameada cinta sedeña, en que alternan el negro, el verde, el rojo, un instintivo acorde encantador... y se ha volcado el arca del sentimiento; para encontrar las vibraciones por lo pretérito, mientras sonaba el agrio y agudo chillido de la chirimía, y se acomodaba el latir del pecho al ritmo arcaico del tamboril... Lo viejo resurgía, lo sano triunfaba el fuero inarcesible.
Y todos éramos mejores, sí, mejores... El bueyero nos lo ha dicho al otro día, —Nostramo: eso de ayer ha estao mucho bien... Marras éramos más presonas... Me lo icía mi amo por la noche,,. Estaba orgulloso de que su carro hubia servio par la fiesta, y me dio un pláceme por lo que hicimos, ¡Nunca, en treinta años, me habló con tanto cariño y con tanto aquel de familia!... ¡Ah! Por ese minuto feliz del bueyero en treinta años de servidumbre, ¿Cómo no dar por buenos todos los esfuerzos y todas las fatigas? ¿Comprenderéis por qué quieren matar los rebeldes y los protervos la historia y la tradición venerandas?
VICTOR ESPINOS El Espinar (Segovia) Agosto de 1924.
Con motivo del evento LA BODA SERRANA
publicado en el periódico EL CASTELLANO
Informe de la Forestal Espinariega de 1917
Este documento de 1917 refleja la seriedad con la que se presentaban las cuentas en esta sociedad local, que gestionaba para el pueblo de El Espinar los recursos forestales en la Dehesa de la Garganta del Rio Moros.
Víctor Espinós Moltó (1871-1948) y El Espinar
¿Quién era Víctor Espinós?
Víctor Espinós Moltó (1871-1948) (Fuente)
Víctor Espinós fue una persona polifacética, se licenció en Derecho en la Universidad de Madrid, pero también estudió piano y armonía en el Conservatorio. Su labor intelectual fue muy amplia y abarcó diversos géneros. Fue periodista, reportero, crítico musical, traductor, conferenciante, autor de cuentos, obras de teatro y poesía, y bibliotecario.EL ÓRGANO DE LA PARROQUIA DE EL ESPINAR - Por Víctor Espinós
La villa segoviana de El Espinar es una de esas poblaciones montañeras en las cuales, y rodeadas de señales de decadencia urbana que, en ocasiones, roza con la más dolorosa ruralidad, se advierten restos de pasada grandeza: casas solariegas de gran alzada y noble arquitectura severa; finados y cobertizos cuya disposición y dimensiones acusan aún el recuerdo de los grandes señores de ganado; ruinas de fuertes torreones y lienzos de murallas, donde el jaramago y el mastranzo son refugio deleitoso del lagarto y el dragoncillo heráldicos, huéspedes del escombro; en los patios bordean los cardos agresivos el labrado brocal del pozo, dueño del misterio.
UNAS CALLES CON HISTORIA (SÉPTIMA PARTE) - calles del doctor D. Felipe Pérez Ruano y del doctor D. Primo Gila Regidor
El paseo que os propongo hacer este mes va dirigido a visitar las calles del doctor D. Felipe Pérez Ruano y del doctor D. Primo Gila Regidor. Calles localizadas en El Espinar y próximas entre sí. La primera calle es paralela a la calle Soledad y la otra es perpendicular a esta última calle.
UNAS CALLES CON HISTORIA - SEXTA PARTE: Paseo del Doctor Martí Esteve
Por María Yolanda González Gómez, Jefe del Archivo Municipal.
Un mes más y aprovechando el tiempo estival, pasearemos por un lugar localizado en pleno pulmón de El Espinar.
Así, con este fin, hemos elegido un paseo que comienza perpendicularmente con la Carretera de Ávila, es decir con la SG-500 y se dirige a la zona del Camino Forestal del Monte de Aguas Vertientes.
Teatro en El Espinar - “La Emperatriz en la Villa”
D. Joaquin Aznar Mendiola, gran seguidor de esta página y sus redes sociales, comparte con nosotros un recuerdo de 1969, un festival, celebrado en la Plaza de Toros, patrocinado por el Ayuntamiento, donde se representaba la obra de Víctor Espinós bajo su propia dirección artistica, "La Emperatriz en la Villa"; Fantasía en prosa y verso en la que se incluía el Misterio de "San Eutropio y el Zagal"
Él nos comenta: "Os adjunto unas publicaciones y las fotos que tengo, sobre el Teatro en El Espinar. De la Asociación 30 de abril, del año 1994, sobre la historia del teatro en el municipio, y un artículo de Juan Andrés Saiz Garrido, donde se nombra, en 1969, “La Emperatriz en la Villa”, escrita por Víctor Espinós, y en la que formé parte del reparto, espero que os guste y si alguien tiene más fotos, desearía que las compartiera, las mías son de mi circulo de amigos."
LEYENDA DE LA ROCA DEL INFIERNO por FÉLIX SEGOVIA
Datos Meteorológicos El Espinar 2021
Texto traducido de la Primera Carta Puebla de El Espinar. Año 1.297
El 8 de julio de 1297 se le concede a El Espinar la carta puebla, constituyéndolo como entidad independiente de la ciudad de Segovia. Ésta fue concedida por el Concejo de Segovia y confirmada, en 1300 por Fernando IV. Junto a la carta puebla se le otorgó diferentes privilegios y derechos que fueron acicate para un aumento de la población.
Estadísticas Climatológicas de El Espinar 2020
Los datos que se muestran han sido recogidos en la ESTACIÓN METEOROLÓGICA Nº 2471Y (AEMET SAN RAFAEL - Fábrica de maderas), por LOS OBSERVADORES: ENRIQUE MARTÍN Y JOSÉ ENRIQUE MARTÍN
Análisis por Fernando Villalba @srvillalba
Terminó con una anomalía de +1,2 grados respecto a los 10,2ºC de media en el período 1987-2020.
La mitad de la precipitación de todo el año cayó en otoño, siendo este el más lluvioso de la serie, solo superado por el de 1993 (426 mm) y 1989 (430 mm).
Destacar también los días: -18 de septiembre: 57,8mm y -20 de octubre: 76,4mm
En ambos se superaron la efeméride de mayor precipitación en 24 horas para cada mes.
Septiembre de 2020 acabó como el más húmedo del período de referencia.
hacer clic en las imágenes para ampliarlas
NOTICIAS DE SEGOVIA
UNAS CALLES CON HISTORIA. QUINTA PARTE: CALLE SERRANO, PASEO GIL BECERRIL Y PASEO RIVERA
Por María Yolanda González Gómez, Jefe del Archivo Municipal.
Un mes más, seguiremos paseando por nuestro Municipio, y en este caso nos pararemos en el núcleo de población de San Rafael, donde se encuentran tres calles de las cuales hablaremos:
• CALLE SERRANO.
• PASEO GIL BECERRIL.
• PASEO RIVERA.
Teniendo como fuente de investigación los Libros Plenarios del Archivo Municipal, nos sumergimos en el estudio de dos años 1902 y 1906.
Concretamente en el año 1902 la Corporación de ese momento, tuvo la necesidad de dar nombres a varias calles de San Rafael que carecían de él y por ello en su reunión plenaria de 4 de Octubre de 1902 describieron “que una de las calles empezaría en el caño público, subiendo entre ciertos hoteles de D. F. Río y D. J. Gayangos y la otra calle comprendía el camino construido en el año 1901 que empezaba en la Carretera General a la esquina del prado de C.Geromini y subía por los hoteles de D. J. Quintana y otros”
Después de informar de la localización de las calles, la Corporación “en su deseo de perpetuar la memoria de los Señores D. LEOPOLDO SERRANO y el EXCMO. SR. DON JAVIER GIL BECERRIL, por el interés que en todo tiempo han demostrado a favor de la localidad en la resolución de numerosos asuntos, acordó por unanimidad, dar el nombre de CALLE SERRANO a la primera calle descrita y el de PASEO DE GIL BECERRIL a la segunda”.
Ambas calles son paralelas y desembocan en la Carretera N-VI
Pero, ¿Quiénes fueron estos señores?
D. Leopoldo Serrano, fue militar y político, comandante de infantería, subsecretario de la presidencia del Consejo de Ministros del Tribunal de Cuentas, Senador, Gobernador Civil y Caballero de la Orden de Calatrava.
D. Javier Gil Becerril, fue diputado, senador, abogado y Secretario del Congreso de los Diputados.
Ambas personas estuvieron totalmente integradas en la vida de la población de este núcleo.
Siguiendo nuestra ruta, nos dirigimos a un paseo perpendicular a la C. Serrano y C. Carlos Mendoza y nos situamos en el PASEO RIVERA.
¿Por qué se llamó ese paseo, Paseo Rivera?.
Don José Rivera Ortiaga fue vecino de Madrid y amante de San Rafael. Su labor altruista por conseguir el progreso de este núcleo, hizo que la Corporación, suscribiera un acuerdo plenario el 13 de Enero de 1906 en el que se justificaba el nombre de una calle. El acuerdo suscrito decía:
“En vista de haber ejecutado en el año anterior 1905 a su costa D. José Rivera y Ortiaga una carretera con sus correspondientes alcantarillas en la calle que existe detrás de las casas de la Fonda de San Rafael, se acordó en primer término demostrarle el agradecimiento de esta Corporación por su generosidad y en segundo dar en lo sucesivo el nombre de PASEO RIVERA”
Y en el Paseo Rivera, uno de los paseos más bellos y emblemáticos de San Rafael, acabamos nuestra ruta sobre el nombre de las calles de nuestro municipio.
UNAS CALLES CON HISTORIA. CUARTA PARTE "Joanario Apellaniz y Gonzalo Martín"
por: Mª Yolanda González Gómez, Jefe del Archivo Municipal de El Espinar.
CALLE JOANARIO APELLANIZ EN EL ESPINAR.
Nuestro viaje comienza en esta ocasión por una calle localizada en El Espinar,
la calle JOANARIO APELLANIZ.
Perpendicularmente a las C. Abundio García Román y C. del Olmo se localiza la
calle Joanario Apellaniz.
¿Quién fue D. Joanario Apellaniz?.
Pues bien, D. Joanario Apellaniz Monreal, nació en el año 1840 y según dicen
algunas personas mayores de nuestro entorno procedía de Logroño. El 8 de
febrero de 1882 falleció a la edad de 42 años, según consta en la inscripción
que se conserva en la Capilla Mayor del Cementerio.
Trabajó como administrador de los Marqueses de Perales, realizando sus
funciones en Prados, pero con residencia en el Palacio de los Marqueses de
Castelar. Estas funciones las compaginaba con las que realizaba en el
Ayuntamiento.
En el año 1871, fue regidor segundo (teniente alcalde) y procurador síndico. Y
tras las elecciones celebradas en El Espinar en el año 1879 y realizado el
escrutinio sobre el nombramiento de Alcalde y Concejales, resultó como Alcalde
D. Joanario Apellaniz. Tomó posesión el 1 de Julio y dos años después en las
nuevas elecciones, renovó su mandato, mandato que terminó a raíz de su muerte.
En la sesión del 19 de Febrero de 1882, el primer teniente alcalde dio a
conocer la defunción del alcalde y se procedió a constituir un nuevo
ayuntamiento.
Según aparece en el certificado de defunción de la Parroquia de El Espinar, se
dice textualmente:
“No hizo testamento, ni recibió sacramento alguno por haber muerto
repentinamente y a consecuencia de un balazo de revolver que se le disparó
casualmente y contra su voluntad”.
Otras versiones sobre la muerte de este señor, apuntan a un hecho provocado por
una segunda persona, desde su muerte por una paliza en Prados, hasta su muerte
provocada por un explosivo colocado en la montura de su caballo, cuando se
dirigía a Prados a trabajar.
Fuera lo que fuera, su buen hacer por El Espinar contribuyó a que se le
homenajeara, dedicándole el nombre de una calle y una travesía, según consta en
la relación de calles existentes en el año 1948.
La importancia de este señor fue tal, que el 6 de Diciembre de 1992, día de la
Constitución, la Corporación del momento, para celebrar esa fecha centrada en
la figura institucional de los alcaldes, se decidió homenajear a Don Joanario,
un ALCALDE CONSTITUCIONAL DE EL ESPINAR.
CALLE DON GONZALO MARTÍN EN SAN RAFAEL
Dejando esta calle, salimos de El Espinar a San Rafael y paralela a la C.
Mariquita se localiza la calle de DON GONZALO MARTÍN.
¿Quién fue Don Gonzalo Martín?.
Don Gonzalo Martín fue un maestro que se dedicó durante 46 años a la educación
en San Rafael.
Era el año 1963 cuando padres de familia y vecinos de San Rafael, constituyeron
una comisión que se encargaría de organizar un homenaje a Don Gonzalo. La
comisión pidió al Ayuntamiento que se le concediera el nombre de una calle.
Después de varias gestiones, se decidió en el Pleno del 30 de Noviembre de 1963
dar el nombre de D. Gonzalo Martín Arévalo a una calle sin nombre en esos
momento. En el mismo pleno, el Ayuntamiento se adhirió al homenaje de esta persona,
que fue también concejal en el Ayuntamiento durante bastantes años.
El homenaje consistió en la celebración de una misa y la entrega de la Cruz de
Alfonso X el Sabio, para premiar sus méritos en educación, en el antiguo cine
Avenida, cruz que desde hacía tiempo se la había concedido y que se adquirió
con los fondos recaudados por una suscripción popular abierta al efecto.
Posteriormente se llevó a cabo una comida en un hotel de ese lugar, terminando
el correspondiente evento.